Por qué cuidar el planeta es cuidarte a ti mismo
Cada vez somos más los que buscamos ser una mejor versión de nosotros mismos.
Entrenamos, nos preocupamos por lo que comemos, nos mantenemos hidratados, cuidamos nuestra imagen personal y como nos proyectamos.
Y también nos transformamos por dentro, meditamos, seguimos asesores y mentores, buscamos motivación e ideas novedosas y nos abrimos a la creatividad, al placer y al mindfulness.
Entendimos por fin que debemos aceptarnos y reconciliarnos con lo mejor y lo peor de nosotros mismos. Y comenzamos a amarnos, a mimar la niña/o que fuimos alguna vez.
Entonces esta transformación, si es verdaderamente auténtica, se manifiesta transversalmente, ya no distingue aspectos ni divide la vida por áreas.
Este amor profundo por tu propio ser te conecta amorosamente con el universo, te confunde con el todo, entonces ya no hay distinción, ahora cuidar tu entorno también es cuidarte a ti mismo. En cada detalle se manifiesta tu amor propio, cada espacio es tu templo, es tu espacio de encuentro y de celebración.
Por eso creemos que cuidar el planeta es gesto de respeto a la creación pero más que nada a uno mismo. Tal vez comenzar cuidando nuestros entornos sea un puntapié para comenzar a respetarnos más, a estimarnos más...
Y tú, qué actos amorosos hacia tu entorno estas manifestado? Ya me dirás...